UNA BOLITA DE NAVIDAD


Érase una vez una bolita de color fucsia, que no se consideraba un simple adorno, pues se trataba de "UNA BOLITA DE NAVIDAD", de las que se cuelgan en el árbol navideño.

Como todos los años, tenía un sitio fijo en la parte baja del árbol junto a las otras bolitas de color verde y azul; pero ella siempre se estaba quejando porque creía que en ese lugar no se le veía nada ... Le molestaba mucho cuando otros adornos la tapaban y por eso quería las luces más cerca de ella para brillar más que nadie, pues pensaba que los demás adornos no las necesitaban ya que no se les veía tan bien como a ella. Era muy presumida y quería ser vista por todos.

Como era de esperarse, también sentía una especial envidia por la estrella que se colocaba en la cima del árbol. Muchas veces soñaba con convertirse en una de ellas y ocupar su lugar, que creía que era el mejor. Por eso, todas las navidades se sentía infeliz y no disfrutaba de estas fiestas tan especiales.

Un año se cumplió su deseo y como por arte de magia se convirtió en una estrella de navidad. Se miró en el espejo y al ver su reflejo, no lo podía creer ... ¡Qué bien se sentía! ...

Finalmente llegó la navidad y el ansiado momento de poner el árbol en la casa. Los niños estaban muy contentos y empezaron a decorarlo de abajo hacia arriba con toda clase de adornos, pero ella tuvo que quedarse hasta el final de la caja y esperar a que los padres llegaran para que sea colocada en su lugar; porque los pequeños de la casa no llegaban tan alto para poder hacerlo ellos mismos. La pobre bolita de navidad convertida ahora en estrella, se sentía muy triste y vacía ... No le gustaba ser la última de todos.

Cuando la subieron notó un poco de vértigo; además se sintió muy sola pues no tenía a nadie con quien jugar ni hablar. Pensó que no era tan divertido ser una estrella ... Antes se la pasaba mejor cuando era una bolita de navidad y llorando deseó regresar el tiempo atrás ...

Y de repente despertó.

Todo había sido un sueño. Se quedó muy contenta al ver que seguía todo como antes y desde aquel día nunca más tuvo envidia de los demás, y disfrutó mucho de las navidades.

Comentarios

  1. Qué bonita historia, Rosas, tan tierna, me encantó. Por cierto que la decoración navideña está preciosa.

    Besos.

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  2. Podía haber sido el árbol. Buena historia.

    Saludos

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  3. ay qué bonito...cada uno tenemos nuestro sitio que si miramos bien es muy importante, tenemos que fijarnos en lo bueno que todos tenemos, verdad? saludos.

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  4. Un cuento muy bonito que nos hace reflexionar que cada cual tiene su lugar y tiene que aceptarlo y ser feliz con ese lugar que le toca vivir.Besotes

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  5. una bella historia amiga,quiero dejarte un fuerte abrazo y desearte una hermosa navidad junto a tus seres queridos y un año repleto de momentos agradables y felices.

    BESITOS DE COLORES Y FELIZ NAVIDAD!!!!!

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